La última Pin-up

Se nos fue Farrah Fawcett y con ella la última de la estirpe de otras bellas como Marilyn Monroe, Betty Grable, Lana Turner y María Sorté (antes de que Ernesto Alonso la volviera virgen e impoluta).
La Pin-up es la mujer que podía volverse estandarte de una generación, con un algo, además del cuerpazo, sin necesidad de publicidad ni enseñar más allá de lo que la liga de la virtud exige.
Recuerdo que yo tenía el famoso póster de Farrah en mi cuarto y junto con mi hermano y mi primo pasábamos lista a todas sus virtudes. Yo en aquel entonces no había conocido mujer, sólo las había visto en revistas y películas; tampoco había desarrollado el gusto por esas mujeres de curvas definitivas y maravillosas, como Caty o Gabriela R, o Gaby. Y entonces Farrah me parecía maravillosa, con su sonrisa perfecta y su melena rubia y su cuerpo ceñido por aquel traje de baño rojo. El sexo me era desconocido, así que quizá sólo pensaba en invitarle un chesco y una gordita de chicharrón.
De la manera que fuera,pero aquella guerita nos había conquistado.
Y hoy ya no está. Se fué, mientras otros degenerados-delincuentes-malditos-rateros-sin corazón, reptan por esta tierra con un salud de hierro dañando, destruyendo. Mientras que aquella rubia angelical fue destruída por el cáncer
Después de Farrah, ya no habrá Pin-ups, sólo playmates de a mes.

Anoche la soledad vino a a vivir a mi casa

No la pude echar; amenazas, llanto o indiferencia, nada sirvió.
Yo trataba, por todos los medios, de que se largara a otro lado, de adularla diciéndole que merecía ir con personajes más famosos, de recordarle citas más urgentes, mansiones llenas de lujos.
Mientras, sin hacerme caso, ella recorría la casa detenidamente, no porque estuviera inspeccionando, sino porque ya se sentía a gusto en este lugar y buscaba el lugar para instalarse definitivamente.
Desde entonces está ahí, ensombreciendo todo, mientras en sus ojos negros, muertos, se reflejan las borracheras, las crudas y los sollozos.
Ella recibe mis maldiciones con una sonrisa rota, mientras devora con alegría otro trozo de mi corazón.

Que no entre a tu casa, no hay servicio de fumigación contra ella.

Los Blogs

Christy Canyon

Me doy cuenta que algunos blogs son demasiado largos para leer y no todos somos BEF, ni Mauricio Schwarz, ni Liz Sobarzo, para interesar a los cyberlectores.
Muchos de nosotros nos emocionamos y todo aquello que nadie quiso oir o publicar lo volcamos aquí con la secreta esperanza de que ahora sí, el mundo se dará cuenta de nuestra prosa elegante, buen humor y verdades universales...
Pero no es así, el lector a la quinta línea ya perdió el interés y nosotros apenas estamos inciando el prologo del tema a tratar.

Esto lo digo porque hace unos días, un blogero hizo una entrada sobre el cine porno gringo a partir de los 70, y a pesar de lo atractivo del tema, no pude resistir las experiencias personales, que se mezclaban con la historia muchas veces y la erudición desmedida del autor acerca del tema, lo que me dio mucha envidia...
Así que apenas iba en John Holmes y las primeras pelis de Ron Jeremy y la belleza extrema de Christy Canyon, cuando cerré la página, para siempre.
Y eso que el autor decía que esa era la primera de tres partes, lo que sin duda estructurará una enciclopedia del tema, pero que no leeré.

Spot

"Aldo es dueño de su propio negocio de modelos a escala, y le va muy bien a pesar del momento económico, además ya es maestro en Letras. Se casó con Gabriela y ambos son muy felices y tienen una fama como escritores bien cimentada. Ahi lo ves disfrutando de su casa en el bosque".

No hagas ruido, Aldo está soñando.

Nunca me he acostado con una prostituta...

(Fotografía de la página Área Vip México).

Ni he ido a un Table, ni a una casa de citas. Así es, tal vez suena increíble. Y no es que me dé baños de pureza, ni mucho menos tenga un trauma con ellas como Jack El Destripador. Simplemente nunca se dio el momento, ni el lugar ni el espacio. Hace tiempo me entró la curiosidad y comencé a indagar entre conocidos que me refirieron lo mismo historias de terror, que de placer absoluto... Y se me quitaron las ganas.
Además, digan que soy anticuado, cursi, romántico; pero el sexo acompañado con la frase "No es desconfianza, pero págame por adelantado" me parece deleznable.
Para que dos cuerpos se confundan y haya gemidos, fluidos, y todo lo que haya menester, debe existir, al menos, un mínimo lazo sentimental. Porque si no es así, todo es un mero intercambio comercial... un trabajo pues, que le quita todo el misterio y la belleza al sexo.
Ahora, no condeno a quienes la ejercen y a quienes requieren sus servicios. Aunque en un mundo ideal esas historias de niñas prostitutas y mujeres que lo hacen por hambre no deberían existir.
Ni siquiera ahora, en estos momentos en que añoro tanto un cuerpo femenino me atrevería a contratar una. No me gustaría oir; "tanto por esto, tanto por esotro".

...Además, sólo me alcanzaría para una de las que cobran un pollo rostizado y unos chescos por el servicio.