viernes, 28 de mayo de 2010

Tengan miedo... mucho miedo

Pronto:

Mis top list de todo; libros, pelis, música, mujeres, seres maravillosos, desgraciados que nunca olvidaré, paseos, comida, fiestas, en fin...

Quizá tú seas uno de estos personajes.

Ya era tiempo ¿O no?

miércoles, 26 de mayo de 2010

Excursión a Los Dínamos

No recuerdo bien, debe haber sucedido a fines de los 60 o principios de los 70. Entonces llegar a esa zona no era tan fácil.

Nos levántabamos como a las 8, mi mamá nos daba un vaso de leche, un pan y su bendición, y salíamos rumbo a Tacubaya, de ahí salía un camioncito que llegaba al zócalo de la Magdalena Contreras, que entonces lucía como un pueblo lejano e idílico, para entonces ya eran las 11 de la mañana. Ahí debía esperar uno el otro camión que salía a los Dínamos, que lo hacía cada media hora, y los domingos estaba lleno de gente, así que cuando salía, los paseantes, jóvenes casi todos, se lanzaban como estampida para alcanzar lugar, sin importarles los dos chamacos y su papá que también querían subirse. No sé cómo, pero siempre lográbamos subir, aunque jamás alcánzabamos asiento. Y luego venía el lento, bello y espectacular ascenso por aquellos enormes bosques y barrancas, siempre me horrorizó la idea de que al camión le fallaran los frenos y fuéramos a dar al fondo de aquellos insondables barrancos.

Cuando por fin llegábamos al primer Dínamo, entonces era hora de alcanzar la cima, y ni tardo ni perezoso, mi papá emprendía la subida a paso veloz, mientras yo y el Tomis, ibámos atrás de él sacando la lengua y pregúntandonos por qué caminaba tan rápido. Después de una hora, más o menos, llégabamos a cima y contemplabámos la ciudad desde la quietud de ese lugar, recuerdo el viento fresco, el olor a pino, la quietud, ¡el paraíso! De bajada ya era otra historia, porque entonces mi papá nos enseñaba las características de las plantas, del río, de los insectos, a beber agua pura de las rocas, a mirar el cielo, a cuidar el paso... sin duda que nos enseñó a amar la naturaleza, tal y como él lo hacía. Yo me sentía feliz imaginando que estaba en el terciario y que de pronto vería un caballito prehistórico, o un dyatrima, o un platibelodón, en aquel bosque precioso en el que rara vez veíamos o escúchabamos a alguien a lo lejos. Jamás nos perdimos, porque mi pápá era experto en eso de caminar por el bosque. Una vez vueltos al inicio, el olor de la leña y lso comales hacía agua la boca, cuando Don Federiquito llevaba lana nos compraba unas y un chesco y sí no, era tiempo de sacar las tortugas de queso de puerco con frijoles que había preparado mi mamá y admirar la pared rocosa, mientras mi papá platicaba con los chavales acerca del mejor método de escalada y de cómo él casi se muere en ese intento.

Llegábamos a nuestra casita de noche, todos sudados y enlodados, pero felices de aquellos momentos con la naturaleza, que yo creía serían eternos.

Volví dos décadas despúes, cuando iba a Bachilleres y aquello ya era un desastre; invasiones al bosque, pintas en las rocas del río, basura, basura, basura, gente, gente, gente.

Ya no he vuelto, me dicen que aquellos bosques primigenios son ahora colonias paupérrimas y el peligro de que a uno lo maten, violen o roben en esas veredas que yo conocí desiertas, es un peligro latente.

La ciudad y sus habitantes, monstruos que devoraron y dañaron su ciudad sin sentido, sin conciencia, hasta que un día reviente...

Pero aquellas excursiones, con su gelatina de leche con rompope, jamás las olvidaré.

martes, 25 de mayo de 2010

Vida después de los 50

Sí, hay vida más allá de los 50

Te ves en el espejo y te das cuenta que ya no está aquel muchachote de piel tersa y cuerpo de Apolo. Ahora ves un rostro que acusa el paso de los años, las arrugas adornan esa cara, en vez de melena hay una rala cabellera con tintes plateados y los marcados abdominales dieron paso a una amplia curvatura. Te aterrorizas porque ese señor eres tú mismo. Sientes que te sube el colesterol, que te baja la presión, que te duele el hígado, los pies y la espalda y temes que en cualquier momento te diagnosticarán lo peor; quieres echarte de cabeza al primer bote de basura, ahogar tu pena en alcohol o encontrar el método de suicidio menos doloroso.
Pero, ¿qué te sucede?
Cuando fuera de los círculos médicos se comenzó a hablar de andropausia, el género masculino imaginó que sufriría las mismas catástrofes que sus mujeres. En nuestra sociedad, que rinde culto a la juventud, pasar los 40 es perder la “inmortalidad” y la belleza. Después de esa peligrosa frontera llega la “crisis de la edad madura” tratamos a toda costa de parecer jóvenes, a veces con resultados patéticos, para que no nos consideren “acabados” en todos los terrenos. Pero todo forma parte de un proceso natural e irreversible, sólo que nadie nos preparó para ello. El organismo inicia el viaje para la tercera etapa de la vida. Hay cambios, sí, pero no significan decrepitud instantánea, hay que conocer en que consisten esos cambios, para vivirlos y sobre todo aceptarlos.

Te pueden decir “viejo andropaúsico” si:
• Te ataca un temor irracional de que “ya no funcionas” en el sexo y tratas de demostrar lo contrario al tener aventuras a granel (con chicas jóvenes, claro).
• Tu autoestima está por los suelos y sientes que fracasaste en la vida. La depresión afecta a tu familia y alcanza hasta las relaciones laborales y sentimentales.
• Para demostrar que no estás “viejo” te enredas en múltiples proyectos y trabajos, aunque a veces te falta el aliento. O lo contrario, decides “no estorbar” y te vuelves un eremita.
• Compites de manera patólogica con los jóvenes y gastas miles en tratamientos rejuvenecedores, cremas, inyecciones y hasta cirugía estética.

Bueno, al menos puedo decir que para mí no aplican ni el primero ni el último punto, ja, ja, ja, ja,, cof, cof, ayyy, ayyy mi espalda.

viernes, 21 de mayo de 2010

Discusión en foros electrónicos

Me da gusto ver el nivel de la discusión en Internet, hombres y mujeres de todas las edades se unen por el gusto de proponer y discutir razones y entender las diferencias de opinión que existen a causas de razones religiosas, políticas, musicales, o simplemente personales. En estos foros se discute de todo, desde el aborto hasta la Evolución, ahora, como un ejemplo, no entraremos en esos temas, sino en uno más tranquilo y rosa ¿Qué les parece la equivocación sufrida por doña Thalis al interpetar una canción en un programa de televisa?


Thalia se equivoca al interpretar una canción.

Opina:

Maryluz: Bueno, yo pienso que Thalia es una gran artista y que se equivocó por nervios, eso le puede pasar a todos.

Chilemexicanomascabel: Eres una estúpida y descerebrada, sólo a una idiota como tú le puede gustar talia o cualquiera de esas mierdas, pudránse todos.

Michos: Dios está en todas partes y si él quisiera podría destruir al univerzo y a todos ustedes pecadores.

Debolus: Ja, ja, ja, infelices, dios no esiste ni la pendeja música que escuchan, para mi qye deberían drogarse e irse a la b"&))??¡...

Fukito: Perras infelices, no saben que es musika y por eso critican a lso estupiod, ya quisieran tener la juventud, la belleza y la voz de tahaliua.

Tomisyo: Pos yo quisera tener aunque sea su fortuna, ja, ha, ja.

Manuelin: Por eso nuestro pais esta como esta, por idiotas como ustedes, a ni me importa de lo que esten discutiendom vayánse a fregar a la más anciana de su casa...

Intergroup. We are offering replica watches, great prices, great catalog. Don´t miss the oportunity.

Migaman: Thalia, no hagas caso, tu eres hermosa y talentosa, que Dios te bendiga...



Y así por el estilo, tres bendiciones, tres mentadas ad infinitum, ja, ja, ja.

Un saludo

Tomi

Nota
Todos los personajes son ficticios, si existe un nick así es pura coincidencia.

viernes, 7 de mayo de 2010

Consejos de Aldo Tomi Alba para la juventud

1. No te hagas el santurrón, quizá pueda funcionar si eres guapa y joven, pero después nadie te soportará.
2. No refrenes al gusanillo (o en algunos casos, boa) del vicio, déjalo que te devore total y placenteramente, si asumes que eres vicioso, vivirás sin remordimientos inútiles.
3. No formes parte de mafias y grupúsculos culturales que se adjudican como los salvadores de la patria, quizá lo sean, pero nunca te aceptarán como parte de ellos.
4. En cuestión de sexo; estudia, aprende, practícalo, gózalo al máximo en todas las oportunidades posibles, pero siempre cuida a tu pareja y a ti, ya no se necesitan niños para poblar el mundo, ni aumentar las estadísticas de SIDA y nuevas enfermedades venéreas.
5. No seas chismoso ni mitómano, ambas cosas son bajezas y puedes dañar a inocentes, sí lo eres ve a tratamiento y cúrate.
6. En la vida pasarás por momento de estúpida felicidad, gózalos, y no te preguntes cuán pequeños o largos serán, lo que sí es seguro es que no serán muchos.
7. ¿Qué quieres estudiar? ¿¡Letras, Humanidades, Filosofía, Pintura, Diseño Gráfico!? No sé para qué, pero te puedes dar el lujo, antes que desaparezcan.
8. De preferencia sé un rebelde, pero auténtico, no vale la pena ceñirse y obedecer todas las reglas, se siente bien hacer enojar a los cuadrados.
9. Si la naturaleza te premió con belleza, ¡Aprovéchala! Cuántas puertas se te abrirán ante los admiradores, que, boquiabiertos, aceptarán lo que tú digas.
10. No tengas miedo a la violencia física, a veces es necesaria, no les hagas caso a los que pregonan la hermandad y la convivencia, el humano es animal al fin.
11. No te conviertas en fanático, de ninguna clase, son meros borregos que manda un fanático más inteligente.
12. Acéptalo, hombres y mujeres son especies diferentes, jamás se entenderán, pero a pesar de eso pasarás muy buenos ratos… aunque estarás peleando y discutiendo todo el tiempo restante.
13. Antes de defender mariguanadas, paparruchas y tonterías, examínalas bajo la ciencia, y verás que todas se derrumban, desde “Nessie”, pasando por el “New Age” y los “hermanos extraterrestres”.
14. Sigue las modas mientras tengas cuerpo y edad, después sólo harás el ridículo.
15. No te pases de "bueno" siempre habrá personajes traicioneros que te usarán hasta que ya no les sirvas, exige lo justo, en esos casos no pienses en la amistad o el cariño, porque te tacharán de estúpido y tibio.
16. No te sientas mal si eres un perdedor, existen muchos casos en que logran sobreponerse al destino y convertirse en triunfadores; ahí está Travis Bickle, Rocky Balboa, La cenicienta… ¿Qué son personajes de ficción? Es cierto, entonces no tienes remedio.